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Simétrico, paralelo, rectilíneo, surcado, abarcador, clónico, mimético, estable, balanceado, mellizo, igualitario… once ideas que sugiere de entrada, el protagonista-hilo del post de hoy.

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De nuevo, les pido «tengan Uds. la bondad de…» play y amnesia, gracias. (Tiene un raro gis vinílico, en el 1’30» cambia de marcha y después del 5′ es una exposición… universal.) El paralelo oncero que hay en este track número 11 del disco de 2001/2002 de Arturo Sandoval, es que su fama mundial es por ser un excepcional trompetista.

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Gracias a unas gotas de sabiduría materna, para arrancar los invito a tomar once. El avituallamiento va por libre, según la hora en que lo lean y lo que les sugiera el maestro Sandoval al piano, claro.

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Estamos en deuda con un tema de estos.

Estamos en deuda con un tema de estos.

Y eso nos trae a la forma más ordinaria de tener presente el primer entero metadecimal. El doble 1 monopoliza la única forma de llenar las pantallas digitales con el mismo número en cualquier parte del mundo. Ya ven que en muchos lados, de noche se viste de 23. Eso descalifica de esta distinción -intrascendente, por cierto- a las 10:10 pm.

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Muchos hondureños estuvimos pendientes de esa posición de agujas durante los 11 años de cubayera escolar. Otra de esas sabrosas palabras hondureñas, que aquí le pone el Cuba y le corta las mangas a la guayabera. 

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Eso trae a la mente la primera asociación que hacemos muchos niños con el número, o la forma con la que contabilizamos en la mente el primer concepto de equipo. El 10 más 1 portero que genera tantas emociones… y rollizos estados de resultados. Este mismo concepto es un truco mnemotécnico de una multinacional pionera de la autoyuda. Y siempre es un ejercicio entretenido ponerle el adjetivo ideal y empezar a armar las alineaciones. Antes de dejar este campo merece sus 90 caracteres de tiempo, el orgullo paisa del equipo manizaleño de apellido Caldas, campeón 2004 de la Copa Libertadores de América.

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El año 1101 arrancó un siglo cruzado, donde nació la mítica (esta vez tiene mucho sentido el adjetivo) Orden del Temple. Y es también un momento decisivo del Islam en Europa con el último califa de Córdoba. En esos años vive y se inmortaliza El Cid. Se publica un clásico que para muchos es la primera novela de la historia: Genji Monogatari, de la japonesa Murusaki Shikibu. Y ya que andamos por ahí, en el esplendor de la dinastía Song, se emite el primer papel moneda. También en China, Nujng Zonyao publica la primera fórmula de la pólvora y Shen Kuo hace el primer antecedente escrito de la brújula que se ha encontrado. Para acabar con todo esto que redescubrimos hoy, en el año 54, León IX y Miguel Cerulario escinden la Iglesia entre romanos y ortodoxos. Se termina en la ribera norte del Támesis la Torre de Londres, Lanfranc reconstruye la iglesia agustina que se convierte en la Catedral de Canterbury y, lo mejor para el final, en el 96 se dan las primeras clases de la futura Universidad de Oxford y comienza la costrucción de la Catedral de Santiago.

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jedenaście, одиннадцать11の数字الحادي عشر , אחד עשר, 十一个ένδεκα숫자 십일의,  yhdentoista vuoden ikäon bir kişilik takım,  Bueno, ya saben qué significan estas 10 y una maneras -estilo Epcot– de decir lo mismo.

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Y ya que venimos de los idiomas y la Historia, qué cierto es lo de que sólo se aprende uno nuevo de verdad, cuando conseguimos pensar en esa lengua. Cuántas veces los anglohablantes escribieron y escucharon «Érase una vez«, para que nosotros desde las neuronas calderonianas leyéramos Once por todos lados. Uno de estos días ofrezco contarles un cuento vivo que no deja de disfrutarse y recrearse, y que sin falta viene a la mente cuando invocamos el número. Hoy el tiempo no acompaña, pero el principio sería tan simple y perogrullesco como que el 1 con el 1 han generado un 13 de potencial multiplicador y magnético que enriquece cualquier imaginario, por muy real, pedestre o primo que sea el número que comparta el diagrama de Venn. (Ya sé que se oye incomprensible, pero enlazaremos este párrafo desde el cuento futurible –al cuajar– y será como ver el periódico al revés cuando el sudoku esta imposible.

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La siguiente piel de este significante camaleónico se escribe en braile, y trae muchos de los mejores recuerdos publicitarios que guardo. Debo tener al menos una pátina «de españolito promedio» en la cabeza, porque perfectamente podría llevar sus spots de T.V. en el ipod… hasta entre los favoritos. Menos mal que tampoco tengo ipod.

No es el cuponazo ni el supercupón, pero menudo está el del 21-oct-07.

Pero todavía no lo voy a celebrar... porque falta...

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Finalmente, una obra que trasciende la creatividad y la filigrana literaria. Un numeral inamovible de cualquier antología seria de la poesía española. Y aunque de eso entiedo más bien poco, hay consenso amplio en que es un endecasílabo modélico. Aún no consiguen establecer quién es el autor, y pese a que le han colgado el sambenito a nombres nada baladíes, esto sigue siendo un anónimo. 

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Se ha vuelto a alargar la entrada, pero creo que ni Uds. ni yo imaginamos que podían ser tan diversos sólo once lados del mismo sonido. Cuántos más hay. Al final, resultó solo una asociación de ideas a la que le faltaría mucho más tiempo y mejor organización para sacarse el carnet de monográfico que, miren por donde, tiene 11 letras.

Publicado por: Francisco Molina M. 11nov08.
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